jueves, 31 de mayo de 2007

Mi papá

-No lo conociste, ¿verdad?
-No, nunca.
-Te habría encantado.
-...
-Era tan atento con mis amigos, con los amigos en general; nos la pasábamos riendo. Tenía muy buen sentido del humor y no era sarcástico. De hecho, no tenía el tono molesto que nosotros tenemos; ya sabes, cuando tu mamá te manda a las tortillas y sólo dices: "Ay, mamá". Él no lo tenía.
-¿Cuál tono?
-Ya sabes, el impaciente, el flojo, el que no te deja ser amable y sólo hacer un favor contento. Hacía lo imposible por ayudarte en lo que fuera. A veces incluso era incómodo decirle: "ah, qué bonita guitarra", porque ya quería regalártela. Así era.
-...
-Recuerdo le encantaba mi gente. Mis novias. A veces nos escapábamos a la playa y pasábamos el día platicando, en el mar, comiendo hasta hartarnos. Tocando la guitarra. Adoraba a Rigel, y a Gladys antes de eso. Y estoy seguro que ellas a él también. ¿Sabes? Quisiera sentir que sabía cuán extraordinario era.
-¿Se lo dijiste?
-No, la verdad no; uno siempre piensa que esas cosas se sobrentienden. Que uno es rebelde porque parece tan difícil llegarle a los talones a papá y que por eso corremos por su ayuda cuando estamos en apuros. Recuerdo cómo me hablaba la gente de él, ja ja, que era cabrón, decían. Un jefe muy estricto; pero excelente ingeniero. Eso siempre lo dijeron. Ojalá un día sea como él.
-Lo serás.
-Espero, niña. Lo logró todo, ¿no? de la nada. Literalmente, lo logró todo. Promedio de casi 10 en su maestría a los 50 años. Quisiera ser tan inteligente. Dicen que su enfermedad no se da en los tontos. Por eso la oreja de Van Gogh o la misantropía, por eso tanto alejarse de tantos. Hubiera sido más grande su éxito aún si hubiera sido más diplomático.
-Lo tuvo todo.
-Sí, es verdad. Hasta hijos guapos.
-Je je, claro.
-Te habría encantado.
-Estoy segura.
-Me parezco mucho a él; pero en versión malévola.
-No eres tan malo como crees.
-No sé.
-Él está bien, feliz de verte feliz.
-Y yo feliz de que descanse. Se lo merecía. ¿Quién si no él?
-...
-Nos hubieras visto juntos, pura risa; una vez una amiga pasó con nosotros la navidad y mi papá...
-Me gusta.
-¿Qué cosa?
-El brillo de tus ojos cuando hablas de él.
-... era mi papá.

5 comentarios:

Pequeña Saltamontes dijo...

No se me ocurre nada más que ofrecerte un gran abrazo.

Te quiero Luis.

Anónimo dijo...

Saludos, Luis.

Buen post, por momentos me recorde a mi mismo.

Foster dijo...

oye, me gusto mucho tu post :D

Cirantis dijo...

me hubiera gustado conocer a tu papá Luis, sé que fue un gran hombre y buen padre.Si lo pudiera conocer le daria las gracias por formar a otro gran hombre, inteligente y sensacional al cual quiero y adoro con todo mi corazon!..besos y abrazos!! amor...
T
E

Q
U
I
E
R
O

María dijo...

Qué valor tienes, yo no puedo escribir, soy incapaz de escribir algo sobre mi madre. Estoy totalmente bloqueda...no sé si me entiendes.